Presidente de Front Consulting

Vicepresidente de la Cámara Peruana de Franquicias

El formato de las tiendas de conveniencia se ha convertido en uno de los formatos comerciales más emergentes en el sector minorista a nivel global.

Las tiendas de conveniencia existen hace décadas en el mundo y continúan su crecimiento y popularidad, puesto que siguen captado día a día a más consumidores que buscan un mix de productos de una forma más accesible y rápida, generando una buena experiencia de compra brindando una atención amable, rápida y confiable. La gente busca este tipo de tienda cuando tienen que resolver compras puntuales, pequeñas y muy al paso, en lugar de ir a un supermercado.

Es un formato con mucho futuro por delante ya que se va desarrollando a medida de que las sociedades se van urbanizando y valorando más su tiempo. Su superficie puede variar entre los 50 y 200 metros cuadrados, lo cual permite un mayor control y manejo.

Otro factor que las diferencia de la oferta tradicional de las bodegas de barrio es que la mayoría manejan un horario de 24/7 y, además, puedes encontrarlas en cualquier punto ubicado en zonas de gran tráfico de personas.

De acuerdo a una reciente investigación, el significado de la conveniencia va más allá del precio, puesto que la necesidad de velocidad se refleja en los hábitos de compra del shopper en toda la región.

Este nuevo shopper, que es un cliente exigente y a la vez empoderado por su acceso a las redes sociales donde puede impulsar o destruir la imagen de una marca “con un dedo”, exige una buena experiencia de compra, lo que ha obligado a la “dignificación de productos y servicios tradicionales”, fenómeno dado en toda la región, que no es más que ofrecer al mercado un modelo de negocio con toques de dignidad, dando un salto de calidad pero no para un determinado segmento sino al mercado en general.

Este fenómeno también ha estado dándose en nuestro país y hemos visto sobre todo cómo la oferta de productos y servicios se va dignificando y satisfaciendo cada día más a este nuevo perfil de consumidor. Ejemplos tenemos muchos y simples, como son la venta de productos tradicionales como emolientes, sándwiches, anticuchos, ceviches, sopas, etc, que nos demuestran el salto dado en materia de sanidad, calidad, atención, etc.

También esta dignificación se ve en conceptos de servicios. No hace falta explicar mucho pero basta citar algunos ejemplos de evolución claros como son los grifos, taxis y espectáculos, donde la competencia y la tecnología han jugado un rol acelerador en esta dignificación.

Volviendo al tema de la tiendas de conveniencia, que podemos llamarla una bodega de barrio dignificada, un factor muy importante en su diferenciación y competitividad es la generación de economías de escala. El hecho de ser cadenas con centros de producción y acopio permiten estandarización y alcanzar mayores márgenes por volumen de compra y, por ende, mayor rentabilidad promedio.

En el Perú este fenómeno ya lo estamos viviendo y era previsible que se dé. Con la aparición de Tambo, del grupo Lindcorp Retail, en abril del 2015, hemos visto su rápida proliferación de unidades en distintos formatos y ubicaciones que llegan ya a las 200 unidades y de seguro existe un mayor potencial para este tipo de formatos. También le sigue la cadena Mass, perteneciente a Supermercados Peruanos, con más de 150 tiendas y solo el año pasado abrieron más de 100 unidades.

Ya se anunció la llegada de Oxxo, el gigante mexicano con mas de 16,000 tiendas de conveniencia en su región, quien apunta a competir mano a mano con Tambo y Mass.

La estrategia de Oxxo en México ha sido la siguiente: Ellos apuntan a la clase media y alta en las principales ciudades. Una vez logrado el reconocimiento de su marca, generan un mix mejorado de productos que se adapte mejor a sus clientes e inmediatamente empiezan a expandirse en ciudades intermedias.

Sin duda, deberán estudiar primero el perfil del consumidor peruano a fin de ofrecer una oferta tropicalizada.

Creemos que una estrategia de expansión acelerada de Oxxo le permitirá competir rápidamente con Tambo y Mass. Según Enrique Alcazar, consultor de franquicias de México, nos comenta que el perfil de franquiciado han sido familias que cuentan con un terreno o local bien ubicado y que se involucran en la operación generando su autoempleo.

Personalmente, no creo que vayan a desaparecer las bodegas tradicionales ya que las tiendas de conveniencia, como tales, están enfocadas más a un segmento medio y medio alto pero su aparición obligará a las bodegas a replantear el modo de ofrecer sus productos, así como captar y fidelizar a sus clientes habituales. Los que sí se verán algo afectados serán los supermercados, por compartir el mismo público objetivo y por la elección práctica del consumidor de ir a una tienda de conveniencia por productos de compra al paso.

Este modelo de negocio recién empieza y merecemos estar atentos a su evolución e influencia en el mercado retail peruano.

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